
Desde comienzos de año ha aumentado la tensión previa a la campaña electoral en Brasil, que si bien no ha arrancado formalmente sí lo ha hecho en forma de enfrentamiento verbal continuo entre los dos candidatos principales: el actual mandatario, Jair Bolsonaro, y el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva. Ambos van moviendo fichas, preparando el terreno para el desenlace.
Lo que se espera para este año es una batalla agónica entre dos colosos, dos gigantes de la política brasileña que han sabido ocupar su espacio protagónico y que han demostrado su valor político para defenderse y crecerse frente a sus adversarios.
A siete meses de las elecciones presidenciales, todavía es pronto para predecir quién puede ser el ganador. Sin embargo, las encuestas parecen aclarar un poco el panorama.
Según un sondeo publicado recientemente por del Instituto MDA Pesquisa de Brasil, que fue encargado por la Confederación Nacional del Transporte (CNT), en una primera vuelta Lula obtendría el 42.2% del voto y Bolsonaro aparece rezagado con el 28%. Hablamos de una diferencia de más de 14 puntos.
Incluso, según el mismo sondeo –basado en 2 002 entrevistas realizadas entre el 16 y el 19 de febrero de 2022–, esta diferencia se acentuaría todavía más en una segunda vuelta, en la que la diferencia se extiende a casi 18 puntos, llegando Lula al 53.2% y el actual presidente a 35.3%. El resto de candidatos quedan muy rezagados en comparación a los dos primeros lugares.
Ya en el mes de diciembre, la firma Ipespe había publicado una encuesta con datos muy similares: Lula llegaba al 44% de la intención del voto mientras Bolsonaro obtenía el 24%.
Así, las encuestas le dan a Lula una ventaja de entre 14 y 20 puntos, pero Bolsonaro las desmiente. No hay que olvidar que el actual presidente tiene un voto popular que no es desdeñable y con el que podría sorprender desde su populismo de derecha, en el que ataca sin piedad a la institucionalidad liberal.
Lo que ocurrirá en Brasil, en el mes de octubre, es una megaelección. Estarán en disputa no solo la presidencia y vicepresidencia del país, sino también 27 de los 81 escaños del Senado y 513 escaños de la Cámara de Diputados. Además, se elegirán 27 gobernadores. La primera vuelta se celebrará el 2 de octubre, y de ser necesario el 30 del mismo mes ocurrirá el balotaje.
Tomado de Cubadebate