Caracas, 16 Abr. AVN.- Este domingo en diversas comunidades en Caracas los habitantes organizados celebraron la tradicional quema de Judas, en la que el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, entre otros personajes de la derecha nacional e internacional, fue el Judas más repetido en estas festividades.
La tradición de quemar un muñeco de trapo, generalmente elaborado en equipo por la comunidad, que representa a Judas –el traidor de Jesús Cristo en la tradición cristiana– ha sido utilizada desde hace décadas en algunos sectores caraqueños como forma de protesta contra personajes de la actualidad, por lo que este muñeco pasa a tener el nombre, el aspecto y hasta la cara de algunas figura pública de la política nacional o internacional.
Así lo explicó Orlando Acevedo, habitante de San Agustín del sur, en Caracas, donde la comunidad organizó la quema de dos Judas; una que representaba la condena a las injerencias promovidas por Luis Almagro y la otra rechaza los ataques militares por parte del presidente de los Estados Unidos de norteamérica (EE.UU), Donald Trump.
«Esta comunidad tiene una tradición de más de 30 años haciendo el Judas, y todos los años es un encuentro real, con una relación de fraternidad, no financiado por ningún actor político, nada impuesto, esto es espontáneo. Esta era la alternativa que teníamos hace 30 años para protestar en contra del abuso de los poderosos, llegado el día de Judas aquí se quema a los traidores», explicó.
Indicó que la comunidad de San Agustín del sur eligió estos personajes para expresar su rechazo a las recientes acciones del Secretario General de la OEA, en sus intentos por propiciar una intervención extranjera en Venezuela que sirva de escenario para derrocar al Gobierno constitucional del presidente Maduro, en complacencia de los intereses del poder económico imperial, así como en rechazo a la política imperialista y guerrerista impulsada por el presidente norteamericano desde los primeros días de su Gobierno.
«Ese señor (Almagro) vino aquí a Venezuela, a llorar frente al monumento de nuestro comandante supremo (Hugo Chávez), a pedir apoyo para llegar a la Secretaría General y después traicionó a los pueblos de Latinoamérica. Al lado tenemos al otro traidor (Trump), que aprovechando una coyuntura llegó a la presidencia de los EE.UU y en menos de 85 días ya ha afectado a ocho países, y hace menos de una semana lanzó la llamada ‘madre de las bombas’ sobre el pueblo de Afganistán», aseveró.
Por su parte, algunos vecinos del sector El Paraíso, urbanización situada al sur oeste de Caracas, también organizaron la quema de dos Judas, uno en representación del Secretario de la OEA, y el otro representa la postura intervencionista de Richard Blanco, diputado de la derecha por Caracas a la Asamblea Nacional (AN).
Tras leer un testamento escrito en clave de humor, donde Almagro heredaba sus bienes a diferentes voceros de la derecha venezolana, el señor Pedro Lárez, habitante del sector, dio la señal para iniciar la quema de los Judas.
«Queremos recordarle algo más a Almagro, queremos recordarle la valentía de este pueblo, la conciencia, la firmeza de este pueblo, que está dispuestos a defender la patria como sea y en el terreno que sea», aseveró Lárez cuando iniciaba la quema.
En la avenida Lecuna de Caracas, la comunidad de Parque Central también condenó la injerencia de Luis Almagro y celebraba con júbilo el final pacífico de la Semana Santa.
Tomado de AVN
La Covacha Roja 