
Hage Gottfried Geingob, Presidente de Namibia. Foto: Granma
Con vivas a Fidel, a Raúl, y al pueblo de Cuba, el Presidente de Namibia Hage Gottfried Geingob, comenzó sus palabras de homenaje al líder de la Revolución cubana.
Seguidamente, preguntó: ¿Cuál es el precio de la libertad? ¿Cuál es el costo de liberar una nación? ¿Cuánto pagar cuando alguien ha luchado por ustedes, cuándo entonces otros eran aliados de su enemigo?
La lucha de Fidel nunca fue para buscar un beneficio económico sino para ayudar a los países pobres. Y es por eso que estamos aquí. Estamos aquí para saludar y despedir a un compañero que siempre estuvo al lado de nosotros y cuya pérdida jamás podrá ser borrada.
Nuestro padre fundador y líder de la revolución de Namibia, nuestro primer presidente, Sam Nujoma, y el actual presidente de Namibia ambos están aquí. También están con nosotros el secretario general del Partido SWAPO.
También están con nosotros dos altos oficiales del Ejército Popular de Liberación de Namibia condecorados y llevados a los grados de generales, y también tenemos con nosotros a sobrevivientes de la matanza de Cassinga. Y ello solamente ilustra el amor que siente el pueblo de Namibia por Fidel Castro
También como parte de nuestro homenaje, Namibia ha declarado tres días de duelo oficial en honor del compañero Fidel Castro.
Cuba ayudó a Angola y a Namibia en su lucha en contra del apartheid de Sudáfrica, reiteró.
Las fuerzas de SWAPO también entraron en Namibia y entraron en Angola, y fue allí donde las fuerzas racistas de Sudáfrica lanzaron un ataque contra una población indefensa. Fueron las fuerzas cubanas las que vinieron a rescatar a aquellas personas. Fue en esa lucha donde los cubanos ofrendaron sus vidas y también perdieron extremidades.
Después de esa matanza Cuba fue el primer país que abrió sus escuelas en la Isla de la Juventud para educar allí a estudiantes que fueron sobrevivientes de la matanza de Cassinga, sentenció.
La batalla épica de Cuito Cuanavale fue un ejemplo que muestra la convicción de Fidel en la liberación de los oprimidos.
También Cuba puso en peligro su propia seguridad y envió tropas para ayudar al pueblo de Namibia y al pueblo de Angola en contra de las tropas de Sudáfrica.
La batalla de Cuito Cuanavale fue una hazaña para toda el África Austral, y fue una batalla que también condujo no solo a la liberación del África Austral, sino también de Sudáfrica, afirmo el mandatario namibio.
Fidel envió miles de tropas a Angola y Namibia para ayudar a estos países de la opresión de Sudáfrica.
Cuito Cuanavale fue un hito en la historia del África Austral y especialmente esta batalla también propicio la puesta en práctica de la Resolución 435 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, y ello condujo entonces a la independencia de Namibia en 1990.
De hecho, la sangre derramada por los combatientes cubanos también sirvió de fertilizante para liberación y la libertad del pueblo de Namibia, expresó Gottfried Geingob.
A través de su corazón revolucionario desinteresado, el único interés que tenía Castro era la liberación de Namibia, y dedicó muchísimos recursos para lograr la independencia.
Y los cubanos no fueron allá ni a buscar oro, ni diamantes, solamente se llevaron de allí los restos mortales de sus compañeros caídos.
El pueblo cubano es nuestro amigo. Fidel es nuestro amigo. Fidel es nuestro amigo ahora, y para toda la eternidad.
Recordamos siempre a Fidel en los niños de Namibia a cuyos padres les ponen su nombre. Recordamos también a Fidel en los miles de niños de Cassinga que vinieron a Cuba, aprendieron español de manera fluida, y en estos momentos ocupan cargos importantes en el Partido y el Gobierno. Recordamos también a Fidel a través de los médicos, enfermeras y personal de la salud que trabajan sin descanso en nuestro país.
Tenemos todavía mucho que aprender de un hombre que vivió y murió según sus propios términos, agregó.
En momentos en que las personas pierden su fe y se aferran a alianzas negativas, son esos los momentos en que tenemos que tener una mente clara y tener siempre presentes las ideas del compañero Fidel.
El apoyo constante ofrecido por Cuba a África fue preconizado por José Martí. Martí nos enseñó “Que el verdadero hombre no mira de qué lado se vive mejor, sino de qué lado está el deber”.
Las lecciones de Fidel seguirán siendo la guía nuestra en nuestra búsqueda de un nuevo orden mundial.
Nosotros debemos seguir unidos a pesar del colonialismo, y seguir siempre unidos ¡Hasta la victoria siempre!
Al presidente Raúl, a la familia Castro, a nuestra familia cubana. Nuestra lucha es una lucha justa. El dolor de ustedes sienten es nuestro también.
Fidel se nos ha ido, pero el espíritu de Fidel seguirá viviendo.
¡Patria o Muerte, Venceremos!
Tomado de Bohemia